QUIÉNES SOMOS



La SOCIEDAD TEOSÓFICA está compuesta por estudiantes que pertenecen o no a cualquiera de las religiones existentes en el mundo.  Están unidos por su aprobación a los objetivos de la Sociedad, por su deseo de deponer los antagonismos religiosos y congregar a los hombres de buena voluntad, cualesquiera que sean sus opiniones religiosas, y por su deseo de estudiar las verdades de las religiones y participar a los demás estudiantes los resultados de sus estudios. El vínculo que los une no es la profesión de una fe común, sino la común investigación y aspiración por la verdad.  Sostienen que la Verdad debe buscarse mediante el estudio, la reflexión, la pureza de vida y la devoción a elevados ideales.  Consideran que el precio de la Verdad debe ser el resultado del esfuerzo para obtener y no un dogma impuesto por autoridad.  Consideran que la fe debería ser el resultado del estudio o intuición interior y no su antecedente, que debe descansar sobre el conocimiento y no sobre la aseveración.  Extiende su tolerancia hacia todos, aun a los intolerantes, no como privilegio que se abrogan, sino como deber que cumplen, esforzándose por disipar la ignorancia más bien que condenarla.  En cada religión ven una expresión de la Sabiduría Divina, prefiriendo su estudio a su condenación y su práctica a su proselitismo.  Su consigna es la Paz; su aspiración, la Verdad.


Libertad de Pensamiento


En razón de que la Sociedad Teosófica se ha esparcido ampliamente por todo el mundo, y cuenta en su seno con miembros de todas las religiones que no renuncian a los dogmas peculiares, enseñanzas y creencias de sus respectivas fes, se ha considerado conveniente recalcar que no hay ninguna doctrina u opinión, enseñada o sostenida por quienquiera, que sea en algún modo obligatoria para cualquier miembro de la Sociedad, ninguna que cualquier miembro no esté en libertad de aceptar o rechazar.  La aceptación de sus tres Objetos es la única condición para hacerse miembro.  Ningún instructor o escritor, de H.P. Blavatsky para abajo, tiene ninguna autoridad para imponer sus enseñanzas u opiniones a los miembros. Todo miembro tiene igualmente el derecho de seguir cualquier escuela de pensamiento, pero no tiene ningún derecho para forzar a nadie en la escogencia.  Ni un candidato para cualquier cargo, ni ningún elector, puede ser declarado inelegible para ejercer o para votar debido a cualquier opinión que sostenga, o porque sea miembro de cualquier escuela de pensamiento.  Las opiniones o creencias ni confieren privilegios ni imponen castigos.

PRESIDENTES INTERNACIONALES

Col. Henry Steel Olcott, Presidente-Fundador, 1875-1907
Dr Annie Besant, 1907-1933
Dr George S. Arundale, 1934-1945
Sr. C. Jinarajadasa, 1946-1953
Sr. N. Sri Ram, 1953-1973
Sr. John Coats, 1973-1979 
Sra. Radha Burnier, 1980 - 2013
Sr. Tim Boyd  2014 -